Desde hace unas semanas el volumen hídrico de las piscinas municipales de Sax ha descendido vertiginosamente sin que desde la dirección técnica de la instalación se haya ordenado su vaciado. La fuga es preocupante tanto por la cantidad de caudal pérdida como por el desconocimiento de por dónde se escabulle y hacia dónde se filtra o dónde se almacena.
La avería podría remontarse incluso a meses atrás pero no se ha detectado hasta ahora por el parón invernal, por el que se pierden a la semana una buena suma de litros de agua que vendrían a costar a las arcas municipales un importante daño económico y medioambiental.
En funcionamiento, un sistema mecánico rellena automáticamente el caudal perdido por lo que no se percibe la merma, que si ha tenido que ser rellenado manualmente a diario hasta su nivel óptimo.
En el pasado pleno ordinario realizado el pasado jueves 18 de julio, salía a la luz esta consulta que se llevaba a cabo por usuarios de las mismas piscinas municipales, a lo que desde el nuevo consistorio de Sax, se respondía, que se valoraria tras el verano las fugas de agua y sus posibles reparaciones. Esta pérdida podría producir problemas subterráneos que aún no ha dado la cara, por lo que se desconoce la gravedad.