Por cientos se cuentan las personas que asistieron a la visita obligada al Camposanto de Sax, 1 de noviembre, Día de Todos los Santos, que este año estuvo acompañada por una jornada en la que el tiempo acompañó, más bien parecía que fuésemos de camino a la primavera en vez de ir hacia el invierno. Los abrigos y chaquetones se cambiaron por las camisas, jerséis y alguna rebeca por los hombros. Las puertas del Cementerio estuvieron abiertas hasta las 19:00 horas, una hora más del estrenado horario de invierno, que recordar es hasta las 18:00 horas.
La Santa Misa de los Difuntos tuvo lugar a las 16:30 horas en el Cementerio Municipal de Sax oficiada por el cura párroco Alfredo Manuel Beltrá a la cual acudieron los fieles que llenaron la capilla del Camposanto, combinando la tradición de asistir al cementerio para visitar a quienes ya abandonaron este mundo, ya que está acompañada de un profundo sentimiento de devoción, donde se tiene la convicción de que el ser querido que se marchó pasará a una mejor vida, sin ningún tipo de dolencia, como sucede con los seres terrenales.
Hay que recordar que el Día de Todos Los Santos es una fiesta religiosa que se celebra en muchos países de fé cristiana y está instituida en honor a los Santos, conocidos y desconocidos, para compensar cualquier falta a las fiestas de los santos durante el año por parte de los fieles.
