La población de Sax acogió el pasado domingo el acto de bendición, frente a San Blas para ponerse bajo su manto y pedirle protección para la ciudadanía en estos duros momentos, marcados por el confinamiento, el dolor y la inseguridad.
El párroco de Sax, Alfredo Beltrá, siguiendo el ejemplo de otros sacerdotes que han bendecido a sus pueblos con el Santísimo Sacramento, decidía subir a la plaza de San Blas, el pasado domingo 29 de marzo, tras la misa de 12, y desde la misma plaza donde se encuentra la ermita del patrón, dar la bendición con el Santísimo Sacramento a los cuatro puntos cardinales de la villa, «como testigo a nuestro siempre bien amado y venerado San Blas«, tras la bendición se desplazaba junto a un coche de la Guardia Civil, a la Plaza de la Constitución, repitiendo el mismo ritual.
La imagen del sacerdote bendiciendo las calles del pueblo ha causado, por una gran mayoría del pueblo agradecimientos por la bendición del pueblo y, por otra parte, estupor entre los ciudadanos, que no ha dudado en subir las imágenes a las redes sociales, mostrando su asombro e indignación, “de todo hay en la viña del señor” opiniones para todos los gustos.
Bendición de Sax, en la ermita de San Blas.
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Una iniciativa que desde el Ayuntamiento de Sax, la alcaldesa de la Villa de Sax, Laura Estevan, reconocía estar al tanto y que consideraba «de lo más normal«, ya que como aseguraba a la Cadena Ser, la misma primer edil, “el oficio de cura está dentro de los casos permitidos para poder salir a la calle mientras dure el estado de alarma porque se trabaja la fe y, efectivamente, reconoce que sabía que el cura realizaría esta acción a partir de la una de la tarde de este domingo”. Estevan insiste en que «si trabajar desde la fe no es esencial, que se especifique en los decretos» del Gobierno de Sánchez.
Sax ya ha sido bendecido contra el virus
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