Parece ser que las posibles sanciones no evitan el que haya personas que sigan arrojando todo tipo de residuos, tanto restos de obra como enseres del mobiliario, aprovechando la soledad de los lugares o la nocturnidad y oscuridad del momento.
Así lo denuncian públicamente algunos vecinos de Sax en las redes sociales que han dado a conocer el hallazgo de una gran cantidad de restos en zonas cercanas al casco urbano, en parajes de la localidad que en vez de tener una buena imagen se encuentran con muebles rotos, electrodomésticos destrozados, colchones y restos de obra.
Este tipo de hechos no es nuevo, hasta ahora sólo queda lamentar que se sigan produciendo, obliga a previsiblemente poner en marcha un dispositivo de limpieza que costará horas de trabajo al personal del departamento que deban de acometerlo, y se deberá restar con seguridad de otras labores que se deban de realizar en la agenda cotidiana del servicio y las consiguientes quejas de los vecinos.
Al parecer como relata uno de los vecinos estos lugares son ocupados por jóvenes que no tienen otro lugar donde ir, y utilizan estos sitios como improvisados cuartelillos al aire libre donde realizan botellones y sus cenas.
Es esencial seguir evitando estas situaciones, que convierten en vertederos puntuales distintos parajes del término municipal, antes de que se conviertan en permanentes. Las imágenes, hablan por sí solas.