Sax rindió un merecido homenaje a un cantante que marcó toda una época y que, el tiempo lo ha demostrado, sigue conmoviendo a miles de personas en todo el mundo, las mismas que se reunían la noche del sábado 20 de julio el recuerdo de Luis Manuel Ferri Llopis conocido internacionalmente como Nino Bravo, que volvió a nacer con la voz de Serafín Zubiri.
El patio del colegio Cervantes fue el lugar elegido para ubicar el escenario que albergaba a las voces de la Coral Polifónica San Blas y el coro de la escuela de música de los Sones, que, junto a un nutrido grupo de músicos, de la Sociedad Instructiva Musical Sones de Sax, fueron presentados por la mantenedora del acto, Silvia Pastor.
En el evento se hizo un recorrido por la carrera musical de Nino Bravo, con la singularidad de que la base musical que fue interpretada por la Sociedad Instructiva Musical Sones de Sax, bajo la batuta del director titular Sergio Vicedo Reig, algunos de los temas más conocidos del cantante valenciano, como “Noelia”, “Libre”, “Te quiero, te quiero”, “Un beso y una flor” formaron parte de esta banda sonora que maravilló a los asistentes, que tuvieron la satisfacción de colaborar con la Asociación contra el Cáncer Junta local de Sax.
Serafín Zubiri, que comenzó esta gira con el espectáculo hace seis años y lleva más de 100 conciertos a sus espaldas con este repertorio, lleno tras lleno, en cada una de las ciudades, teatros o auditorios donde acude, y que en Sax contó con un espectacular montaje de sonido e iluminación para que la velada se convirtiera en algo único y digno de disfrutar.
Zubiri, también tenía palabras de halago para los Sones de Sax, “me llevo un recuerdo inmemorable, y le doy gracias al destino por haberme puesto en el camino de esta banda la cual os pido desde aquí, que la cuidéis y apoyéis ya que tenéis un patrimonio cultural maravilloso, y debéis hacer lo posible para que ellos sigan haciendo bien su trabajo» han sido muchos meses de trabajo, ensayos y arreglos que finalmente culminó un 20 de julio de 2019, una noche que quedará en el recuerdo de los asistentes, «espero volver a veros» así se despedía Serafín de nuestro pueblo con un hasta luego.