El hábito de caminar en nuestra localidad es una actividad que se lleva a cabo cada día tanto en grupo como a solas, en el pueblo como en la naturaleza para escapar del ruido, ya que caminar es una excelente alternativa al sedentarismo. Ya lo decía Antonio Machado, Caminante no hay camino, se hace camino al andar.
Caminar una de las costumbres más saludables que desde antaño se dan en Sax, se vuelve imposible y peligroso por los fallos en el firme de los caminos vecinales, los cuales son sendas de las llamadas “andarinas”, personas que en su mayoría son integrantes de pequeños grupos de sajeñas y foráneas, que tienen por norma dar un pequeño paseo con un ritmo tranquilo donde se intercalan las conversaciones sobre nuestra actualidad más cercana.
Los caminos más cercanos como el del Estudiante, actualmente reparado deja tramos que, desde la Avenida del Pardo, transcurriendo por el camino del Toyo, una vía con buena anchura, nos encontramos sin duda con un verdadero campo de batalla, donde los socavones son un verdadero peligro para los cientos de personas que practican el caminar como uno de sus pasatiempos favoritos, además de necesario.
Los vecinos del camino del Toyo, están cansados de dar sus quejas al consistorio, que hace caso omiso, o da excusas como que se necesita una licitación para arreglar el camino, aun así el vecindario ve con peligro que los defectos del firme, sumado a la falta de iluminación, puedan averiar automóviles y causar fracturas graves en la personas que deambulan por ese camino, que no son pocas. Por ello, hasta su arreglo total, esperan que los desperfectos, peligrosos, sean reparados por quien competa.
Uno de los caminos favoritos para caminar por sajeños y sajeñas es el camino de Murcia, uno de los puntos con más tráfico por la gran cantidad de casas que son en su mayoría primeras viviendas de familias, que utilizan los vehículos para desplazarse fuera y dentro del municipio.
Este camino de Murcia, está perfectamente gracias al buen trabajo de acondicionamiento que a mediados de los años 80 se llevó a cabo por los mismos vecinos con un coste totalmente costeado por estos, y que hoy en día solo tiene algunas mermas, cerca del caso urbano, y que desde el consistorio son incapaces de mejorar, así como el reciente acto vandálico que se ha cargado la señal de stop que se encuentra cada día en un bancal abandonado.
