Aurelio Arnedo es un poeta curtido. Desde la publicación de Néldoreth en 1997 (Premio Ángel Urrutia de poesía) ha llovido mucho, incluso en estas tierras áridas. Y por en medio, no lo olvidemos, ha desarrollado una incesante actividad en publicaciones como la revista El Castillo de Sax, donde aparte de publicar artículos divulgativos de temas locales, ha dirigido sus suplementos de letras y ciencias. Y es que el autor de “Ventana hacia la nieve”, además de ejercitarse con las estrofas desarrolla también su actividad profesional como docente de educación secundaria en la más estricta de las facetas científicas.
Aurelio Arnedo es un buen ejemplo de que es posible, y hasta deseable, la mezcolanza de materias que en principio pudieran parecer dispares, pero no lo son tanto.
Por eso, no habría que dudarlo: hagan su tardeo, tan de moda, tan agradable en estas jornadas primaverales, pero no falten tampoco a una velada literaria de altura de la mano de este destacable poeta sajeno.