En el siglo XVIII coexistieron en Sax dos instituciones destinadas a favorecer los intereses de los vecinos: el pósito (fundado en la segunda mitad del siglo XVI) y el montepío frumentario.
El pósito tenía como objetivo almacenar granos y prestarlos a los vecinos, en épocas de escasez, en condiciones módicas. La otra institución era el montepío frumentario (relativo al trigo y otros cereales), de carácter benéfico, que consiste en prestar trigo sin recargo, así como prestarlo a viudas, labradores pobres, etc.
El lugar donde se estableció dio nombre a la actual calle Montepío, que con tal denominación apareció en los documentos a comienzos del siglo XIX. Su origen está en las Pías fundaciones mandadas hacer por el cardenal Belluga por estos lugares, en las que se habla del establecimiento de varios “montes píos frumentarios” para el socorro de los labradores.
Durante la segunda mitad del XVIII y principios del XIX convivieron en Sax ambas instituciones, el pósito y el montepío, realizando una importante labor social, sobre todo en épocas de carestía y malas cosechas.
Todavía en 1840, en el Catastro de la Riqueza se cita en Sax la Casa de Montepío “una casa de habitación, sita en la calle del Montepío de esta población…”.
Que el montepío de Sax se debió al Cardenal Luis Belluga (obispo de Cartagena entre 1705 y 1724 y capitán general de los Reinos de Valencia y Murcia durante la Guerra de Sucesión), a comienzos del siglo XVIII, lo confirma un documento de 20 de marzo de 1843. Se trata de un expediente instruido para enagenar en pública subasta la casa del Pósito Pío con aplicación a la obra del puente del Picayo, en este caso se trata del antiguo puente de piedra de dos ojos, que fue destruido por las avenidas del invierno de 1899:
“Pliego de condiciones que el Ayuntamiento constitucional de esta villa de Sax, forma para enagenar en pública subasta la casa titulada del Montepío que correspondía al Pósito Pío frumentario de labradores, fundación del Cardenal Belluga y se compró con los… naturales del establecimiento en tiempo del cura don Juan Sánchez Andujar”.