Frontera habla de todo esto con energía punk, porque el día que lluevan pianos ya los pararemos con paraguas de hormigón, siempre hay solución si quieres avanzar.
Escapar de algo no es huir. Salir de casa, dejar el trabajo, una relación y cruzar la frontera de nuestra zona de confort, para encontrar la felicidad, es algo duro pero valiente.
Cuando nos conformamos ni crecemos ni evolucionamos.